
El Jardín Majorelle, ubicado en Marrakech, Marruecos, es un exótico oasis botánico creado por el artista francés Jacques Majorelle en 1923. Famoso por su vibrante azul cobalto y su colección de plantas exóticas de todo el mundo, este jardín combina arte, naturaleza y cultura marroquí. Restaurado por Yves Saint Laurent y Pierre Bergé, hoy alberga el Museo Bereber y es uno de los lugares más visitados de Marruecos. Ideal para relajarse, tomar fotografías y descubrir la rica herencia cultural del país. Un rincón único que cautiva a todo visitante.
El Jardín Majorelle es una de las joyas botánicas más cautivadoras de Marruecos y una parada imprescindible para cualquier viajero que visite la mágica ciudad de Marrakech. Este jardín es mucho más que un espacio verde: es un símbolo de arte, historia y belleza natural. El contraste de colores vibrantes, especialmente el característico azul Majorelle, combinado con la abundante vegetación exótica, lo convierte en un oasis urbano y espiritual dentro de una de las ciudades más dinámicas de Marruecos.
Con una historia que abarca casi un siglo, el Jardín Majorelle representa el encuentro entre culturas, el amor por la botánica y la influencia de grandes artistas y diseñadores europeos que se enamoraron del alma de Marruecos. Este lugar es testimonio de cómo la fusión entre la cultura marroquí y la sensibilidad artística occidental puede dar origen a una obra viva de gran belleza y significado.
La historia del Jardín Majorelle comienza en 1923, cuando el pintor francés Jacques Majorelle se trasladó a Marruecos en busca de un clima más favorable para su salud. Encantado por la arquitectura y el estilo de vida marroquí, Majorelle compró una parcela de tierra en las afueras de Marrakech y dedicó más de 40 años de su vida a diseñar y enriquecer este jardín único.
En 1931, encargó al arquitecto Paul Sinoir la construcción de una villa de estilo art déco, que posteriormente pintó con un azul cobalto vibrante, hoy conocido mundialmente como azul Majorelle. Inspirado por los jardines islámicos, Majorelle introdujo una extensa colección de plantas exóticas, esculturas, canales de agua y estanques que transformaron el lugar en un santuario natural.
Tras la muerte de Majorelle en 1962, el jardín cayó en el abandono, hasta que en 1980 fue adquirido por el diseñador de moda Yves Saint Laurent y su socio Pierre Bergé. Ambos, profundamente enamorados de Marruecos y de la estética del jardín, emprendieron una restauración meticulosa para devolverle su esplendor original. Gracias a ellos, el Jardín Majorelle fue reabierto al público y protegido como patrimonio artístico y botánico.
Hoy, el jardín es propiedad de la Fundación Pierre Bergé – Yves Saint Laurent, que sigue gestionándolo con el objetivo de conservar su legado y su conexión con la historia cultural de Marruecos.
El azul Majorelle fue patentado por el propio Jacques Majorelle y está inspirado en los colores que él observaba en la arquitectura tradicional del sur de Marruecos, especialmente en los zocos bereberes.
El jardín alberga más de 300 especies de plantas procedentes de los cinco continentes, incluyendo cactus gigantes de América, bambúes de Asia, y palmeras del desierto marroquí.
Dentro del jardín se encuentra el Museo Bereber, una de las colecciones más importantes de arte y objetos tradicionales del pueblo amazigh en Marruecos.
Tras la muerte de Yves Saint Laurent en 2008, parte de sus cenizas fueron esparcidas en el jardín, junto a un monumento memorial.
El jardín ha recibido la visita de celebridades y figuras públicas de todo el mundo, atraídas por la conexión artística entre la moda y la cultura de Marruecos.
La villa azul que construyó Majorelle alberga actualmente exposiciones temporales y sirve como espacio cultural dedicado al estudio del arte marroquí.
Visitar el Jardín Majorelle ofrece una experiencia envolvente en uno de los espacios naturales más simbólicos de Marruecos. Más allá del paseo tradicional, los visitantes pueden disfrutar de actividades enriquecedoras que conectan con la historia, el arte y la espiritualidad:
Recorridos botánicos: Explora senderos bordeados de bambú, palmeras datileras y cactus, mientras escuchas el sonido relajante de las fuentes de agua.
Museo Bereber: Con una impresionante colección de artefactos, textiles, joyería y objetos ceremoniales, este museo es una ventana al alma de los pueblos indígenas del Atlas y del desierto de Marruecos.
Fotografía artística: Los intensos colores del jardín y su diseño arquitectónico hacen del lugar uno de los más fotografiados del país.
Té en la cafetería del jardín: Disfruta del tradicional té a la menta marroquí rodeado de tranquilidad.
Compras en la boutique Majorelle: Libros de arte, cosméticos naturales inspirados en plantas marroquíes y artesanía local hacen de esta tienda un paraíso para los amantes de la cultura de Marruecos.
Momentos de contemplación: Hay bancos y rincones diseñados para la meditación, ideales para absorber la energía del lugar.
Si planeas visitar el Jardín Majorelle durante tu viaje a Marruecos, ten en cuenta las siguientes recomendaciones:
Compra tus entradas en línea para evitar largas colas, especialmente en temporada alta (otoño y primavera).
Visita temprano por la mañana o al final de la tarde, cuando la luz es ideal para fotografías y hay menos turistas.
Evita los viernes por la mañana, ya que muchas instituciones en Marruecos tienen horario reducido por motivos religiosos.
Respeta la tranquilidad del lugar. Aunque es turístico, se considera un espacio de contemplación.
No toques las plantas ni uses flash en el museo, para proteger las especies y los objetos antiguos.
Lleva efectivo en dirhams marroquíes, ya que no todos los puntos de venta aceptan tarjeta.
Consulta el clima de Marrakech, ya que las temperaturas en Marruecos pueden variar mucho entre estaciones.
Gracias a su ubicación estratégica en el moderno distrito de Guéliz, el Jardín Majorelle está cerca de muchos otros sitios de interés cultural e histórico en Marrakech, una de las ciudades más fascinantes de Marruecos:
Museo Yves Saint Laurent Marrakech: Justo al lado del jardín, este museo alberga bocetos, trajes y piezas originales del diseñador francés que encontró inspiración en Marruecos.
La Medina de Marrakech: Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, a solo unos minutos del jardín. Es un laberinto de calles estrechas, zocos tradicionales, y arquitectura islámica.
Jemaa el-Fna: La plaza central de Marrakech y corazón de la vida pública marroquí, famosa por sus músicos, cuentacuentos y vendedores ambulantes.
Palacio de la Bahía: Un magnífico palacio del siglo XIX que refleja la riqueza y la arquitectura andalusí-marroquí.
Museo Dar Si Said: Un museo dedicado al arte decorativo marroquí, que alberga alfombras, puertas talladas, cerámica y objetos tradicionales del sur de Marruecos.
Jardines de Menara: Otro bello jardín, más amplio y tradicional, con vistas a las montañas del Atlas, ideal para caminar al atardecer.
El Jardín Majorelle representa la fusión perfecta entre arte y naturaleza, historia y diseño, oriente y occidente. Este jardín no es solo un lugar de belleza, sino también un reflejo del alma artística y multicultural de Marruecos. Tanto los amantes del arte como los viajeros que buscan un respiro del bullicio urbano encontrarán en este rincón de Marrakech una fuente de inspiración, tranquilidad y conexión con lo esencial.
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¿Dónde se encuentra el Jardín Majorelle en Marruecos?
Está ubicado en el distrito de Guéliz, Marrakech, en la Rue Yves Saint Laurent, a unos 2 km de la plaza Jemaa el-Fna.
¿Qué horarios tiene el jardín?
Abre todos los días, generalmente de 8:30 a 18:00, aunque puede variar en días festivos en Marruecos.
¿Qué precio tiene la entrada?
El costo varía, pero el acceso al jardín suele costar entre 120-150 MAD. La entrada al Museo Bereber y al Museo Yves Saint Laurent se pagan por separado.
¿Está adaptado para personas con movilidad reducida?
Sí, gran parte del jardín cuenta con accesibilidad adecuada.
¿Puedo tomar fotografías?
Sí, pero está prohibido el uso de trípode y drones. En el interior del museo, la fotografía suele estar restringida.
¿Qué tan concurrido es el lugar?
Es uno de los lugares más visitados de Marruecos, por lo que se recomienda evitar las horas punta.
¿Hay visitas guiadas disponibles?
Sí, es posible contratar guías privados que ofrecen contexto histórico y botánico sobre el jardín y su vinculación con la historia de Marruecos.